A menudo creemos que elegimos un objeto de estudio de forma racional y académica. Pero... ¿y si ese objeto también nos eligiera a nosotros? ¿Qué dice de ti aquello que has decidido investigar, observar o analizar?
Instrucciones:
Comparte una breve descripción de tu objeto de estudio (tema, fenómeno, grupo, práctica, etc.).
Reflexiona y responde:
¿Por qué crees que este tema te interesa genuinamente?
¿Tiene relación con tu historia personal, tus valores o tu entorno?
¿Qué te ha enseñado sobre ti mismo/a hasta ahora?
Comenta al menos una publicación de otro/a compañero/a, enfocándote en los puntos en común o diferencias significativas entre sus elecciones y las tuyas.
Objetivo:
Fomentar una mirada más profunda y crítica sobre el vínculo emocional, social o ético que establecemos con lo que investigamos. Esta actividad busca desarrollar no solo pensamiento académico, sino también autoconciencia como parte del proceso investigativo.